jueves, 2 de mayo de 2019


EL APRENDIZAJE COLABORATIVO

El aprendizaje colaborativo en el aula se basa en la necesaria interacción y comunicación de los alumnos entre ellos, con su profesor y su entorno. A medida que el niño o adolescente se integra en esta nueva técnica educativa, aprende a respetar y tener en cuenta a los demás, así como a trabajar en equipo.

El aprendizaje colaborativo en el aula es, en la actualidad, una estrategia y herramienta que se implementa cada vez con más frecuencia. Esta estrategia didáctica tiene un gran impacto en la educación a nivel mundial y deja a la vista que las estructuras educacionales que se han aplicado empiezan a quedar obsoletas.

¿Qué es el aprendizaje colaborativo?
Para entender qué es el aprendizaje colaborativo, es importante saber que sus pilares se basan en la interacción social. Es decir que este tipo de aprendizaje se basa en el trabajo en grupo y las constantes interacciones entre los niños o jóvenes.

El aprendizaje colaborativo en el aula busca, principalmente, potenciar las aptitudes y capacidades de cada estudiante a partir de la interacción y el intercambio de los conocimientos con sus compañeros.

Ventajas del aprendizaje colaborativo en el aula
Esta modalidad de aprendizaje constituye un método fundamental para el aprendizaje de las nuevas generaciones. El aprendizaje colaborativo en el aula en cualquier nivel de estudios tiene muchas ventajas y beneficios.

Entre estas ventajas está el hecho de que es una nueva modalidad que abre paso al aprendizaje en esta era. Por lo tanto, representa una manera de que los estudiantes se sientan motivados.

Por otro lado, como se mencionó anteriormente, el aprendizaje colaborativo tiene que ver con el trabajo colectivo; es decir, en grupo. De este modo, se aprende a interactuar con los demás.

Este trabajo en grupo hace que los alumnos y estudiantes se conviertan en los protagonistas del aprendizaje y que aprendan a colaborar entre ellos para alcanzar el objetivo común. Se destacan, en el camino, las habilidades individuales de cada uno.


Además, el aprendizaje colaborativo en el aula permite que los estudiantes desarrollen habilidades comunicativas entre ellos. Estas habilidades no solo serán útiles en el ámbito educacional, sino también en todos los ámbitos de la vida cotidiana.

Entre otras ventajas de aplicar el aprendizaje colaborativo en el aula, está la de fomentar y desarrollar el sentido de responsabilidad, competencia y liderazgo de cada uno de los niños o jóvenes partícipes. Adicionalmente, y no menos importante, este método involucra a todos por igual, lo que mejora la autoestima de los alumnos y, a su vez, su independencia.

Cómo aplicar el aprendizaje colaborativo en el aula
¿Cómo hacer que los alumnos se sientan motivados y tengan ganas de aprender? ¿Qué hacer para que se potencien las capacidades de cada uno en conjunto y lograr que saquen sus habilidades a flote? ¿Cuál es la forma de fomentar las interacciones dentro de la clase?

Son muchas las preguntas que se hacen en torno a la educación de los niños y jóvenes. Todas ellas se reducen a una sola respuesta: el aprendizaje colaborativo. He aquí que surge un nuevo interrogante para quienes se encargan y tienen el rol de educar a los alumnos: ¿Cómo aplicar el aprendizaje colaborativo en el aula?

«El aprendizaje colaborativo en el aula busca, principalmente, potenciar las aptitudes y capacidades de cada estudiante a partir de la interacción y el intercambio de los conocimientos con sus compañeros»

Fundamentalmente, es el docente quien debe liderar el proceso del aprendizaje colaborativo. Es decir, si bien los estudiantes aprenden colaborando entre sí, necesitan una figura de guía que los oriente y los ayude y motive a aprender.

El maestro será la persona encargada de fomentar en cada estudiante el pensamiento crítico para que después, en el trabajo grupal, cada alumno sea capaz de analizar las miradas de su compañeros de manera objetiva.

Orientadores:
Diana Patricia Buitrago
Jonny Edgar Bernal
Ruth Espinosa 

    Ludwing Leonardo Correa




PAUTAS DE AULA PARA TRABAJAR POR COMPETENCIAS

COMPETENCIAS
La sociedad está reclamando nuevas competencias a los profesionales y a los ciudadanos en general, que requieren el dominio de destrezas y habilidades específicas. Surge un doble posicionamiento: formar sobre esas competencias en el ámbito profesional o desarrollar las en el ámbito académico previo al laboral. Muchas universidades en diferentes países están re diseñando sus carreras a través de nuevos perfiles académico-profesionales en los que incluyen una serie de competencias. Las competencias son factores de superación individual y grupal que permiten el desarrollo de los recursos personales para integrarlos en las posibilidades del entorno y obtener así, de esa complementariedad, el mayor beneficio mutuo. A nivel personal, las competencias son efectivas en la medida en que cada uno establece la base y referencia de superación en sí mismo. Así, somos competentes en la medida en que alcanzamos logros efectivos.

El origen de esos logros está en el perfeccionamiento de nuestras cualidades personales, tanto individuales como sociales. Definición de las competencias Entendemos por competencia el buen desempeño en contextos diversos y auténticos basado en la integración y activación de conocimientos, normas, técnicas, procedimientos, habilidades y destrezas, actitudes y valores. Existen distintos modelos que agrupan determinadas competencias consideradas esenciales desde el punto de vista del desempeño profesional. En nuestro caso, establecemos una tipología de competencias y seleccionamos aquellas que consideramos básicas y que pueden adquirirse durante el período académico universitario. Estas competencias son útiles y valiosas en el desempeño profesional, tal corno se indica en los informes y estudios que hemos revisado previamente.

Las competencias, en nuestra propuesta, guardando coherencia con el modelo de cambio presentado, se clasifican en tres grandes categorías: • Competencias instrumental es: son aquellas que tienen una función de medio. Suponen una combinación de habilidades manuales y capacidades cognitivas que posibilitan la competencia profesional. Incluyen destrezas en manipular ideas y el entorno en el que se desenvuelven las personas, habilidades artesanales, destreza física, comprensión cognitiva, habilidad lingüística y logros académicos.

 Competencias interpersonales: suponen habilidades personales y de relación. Se refieren a la capacidad, habilidad o destreza en expresar los propios sentimientos y emociones del modo más adecuado y aceptando los sentimientos de los demás, posibilitando la colaboración en objetivos comunes. Se relacionan con la habilidad para actuar con generosidad y comprensión hacia los demás, para 10 cual es requisito previo conocerse a uno mismo. Estas destrezas implican capacidades de objetivación, identificación e información de sentimientos y emociones propias y ajenas, que favorecen procesos de cooperación e interacción social.
Competencias sistémicas: suponen destrezas y habilidades relacionadas con la totalidad de un sistema. Requieren una combinación de imaginación, sensibilidad y habilidad que permite ver cómo se relacionan y conjugan las partes en un todo. Estas competencias incluyen habilidad para planificar cambios que introduzcan mejoras en los sistemas entendidos globalmente y para diseñar nuevos sistemas. Requieren haber adquirido previamente las competencias instrumentales e interpersonales.

El Aprendizaje Basado en Competencias (ABC) El Aprendizaje Basado en Competencias significa establecer las competencias que se consideran necesarias en el mundo actual y que, corno es lógico, no pueden ser únicamente determinadas por las universidades sin la consulta y participación de las entidades laborales y profesionales. Fruto de esta colaboración, ha nacido una propuesta de competencias transversales o genéricas que intentan delimitar las competencias esenciales en las distintas profesiones para las que capacita y prepara la universidad, sin significar eso que la universidad ceje en su responsabilidad de formar en todos los aspectos y dimensiones que considere oportunos, pertinentes y necesarios para la óptima formación y capacitación de sus estudiantes.

El ABC consiste en desarrollar las competencias genéricas o transversales (instrumentales, interpersonales y sistémicas) necesarias y las competencias específicas (propias de cada profesión) con el propósito de capacitar a la persona sobre los conocimientos científicos y técnicos, su capacidad de aplicados en contextos diversos y complejos, integrándolos con sus propias actitudes y valores en un modo propio de actuar personal y profesionalmente. El ABC es un enfoque de enseñanza-aprendizaje que requiere necesariamente partir de un perfil académico-profesional que recoja los conocimientos y competencias que se desea desarrollen los estudiantes que estén realizando un determinado tipo de estudios. Su programa formativo debe explicitar las competencias genéricas y específicas deseadas y distribuidas en los cursos que configuren la titulación correspondiente. Este enfoque requiere una gran coordinación y colaboración entre el profesorado para contribuir eficaz y eficientemente al desarrollo del perfil académico-profesional desde cada materia o asignatura.

Elementos principales del proceso de enseñanza-aprendizaje En el sistema propuesto las competencias se convierten en la pieza angular. El plan curricular se formula y se explicita en competencias genéricas o transversales y en competencias específicas. Los cuatro elementos fundamentales del proceso de enseñanza-aprendizaje para lograr las competencias son:
1. Estrategia y metodologías de enseñanza-aprendizaje.
2. Modalidades.
3. Seguimiento.
4. Evaluación.

1.     Estrategia y metodologías
Se entiende por estrategia el diseño de un proceso regulable compuesto por una serie de procedimientos y normas que aseguran una decisión óptima en cada situación, en función de los objetivos perseguidos, incorporando los métodos y técnicas adecuados y ajustándolos a los tiempos previstos.

2.     Modalidades
En esta obra, se entiende por éstas las formas globales de organizar el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Fundamentalmente, se toman en consideración tres grandes modalidades: presencial, semipresencial y on line.
• La modalidad presencial requiere que el estudiante asista regularmente a clase. Allí está el espacio fundamental de aprendizaje, si bien se complementa con otros espacios y tiempos no presenciales, como por ejemplo: laboratorios, estudio personal o grupal fuera del aula, biblioteca, etc.
• La modalidad semipresencial significa que compagina la presencialidad fundamental del estudiante con la enseñanza virtual. Cada día más, las universidades ofrecen asignaturas on line o al menos el soporte de plataformas para facilitar trabajos de los estudiantes desde sus casas o espacios fuera del aula.
• La modalidad on line requiere medios electrónicos y el seguimiento y apoyo docente vía virtual.

3.     Seguimiento del aprendizaje.
El seguimiento del aprendizaje del alumno es un elemento clave en el nuevo sistema. Este seguimiento puede establecerse en forma de tutoría individual y / o grupal; revisión de trabajos y proyectos; control de exposiciones de los proyectos o partes de los proyectos; feedback de ejercicios y resolución de los mismos (casos, problemas, etc.). En síntesis, cualquier procedimiento que permita ofrecer feedback al estudiante de su progreso o que le lleve a efectuar su propia autoevaluación o reflexión sobre cómo va desarrollando su estudio y trabajo académico. Los sistemas de seguimiento pueden ser presenciales o virtuales, a través de sistemas tutoriales, portafolio s u otros medios.

4.     Evaluación.
Aprendizaje basado en competencias "El sistema de evaluación de la asignatura incluye no sólo los aspectos relativos a la evaluación final para la emisión de la calificación final, sino que también indica todo lo relativo a la evaluación formativa, es decir, la evaluación que se realiza para orientar y ofrecer retroalimentación al estudiante sobre sus trabajos, ejercicios y pruebas parciales, o cualquier actividad de aprendizaje sobre la que el profesor/a considere que debe tener información para mejorar".

El desarrollo completo del Sistema de Evaluación de la asignatura deberá ser aportado por el profesor a los estudiantes mediante la Guía de Aprendizaje. En el Programa de la asignatura se deberán recoger de forma sintética y, como mínimo, aquellos aspectos del sistema de evaluación relativos al grado de logro de las competencias de aprendizaje por los alumnos, el cual se reflejará en la calificación final. Esta calificación final será expresada por una puntuación numérica con un decimal. Para ello se deberá precisar:

• En primer lugar, qué se va a evaluar: se deberán evaluar las Competencias Específicas y Genéricas trabajadas. Posteriormente, en la Guía de Aprendizaje se detallarán los lndicadores para la evaluación de cada una de las competencias, los cuales deberán aportar evidencias relevantes y significativas del grado de desarrollo de cada una de las competencias genéricas y específicas.

• En segundo lugar, cómo se van a evaluar dichas competencias: es decir, las Técnicas e instrumentos que se van a emplear a lo largo del proceso (evaluación continua) y al final del mismo (evaluación final). Las técnicas deberán ser variadas para adecuarse a la naturaleza de las competencias trabajadas (por ejemplo: el examen, el análisis de las tareas realizadas, una presentación oral, una prueba de ejecución, la observación de la conducta, etc)

• En tercer lugar, se deben comunicar a los estudiantes los criterios para la evaluación de su aprendizaje y su ponderación en la Calificación final. El sistema de calificación deberá reflejar una distribución equilibrada entre las distintas competencias trabajadas y las distintas técnicas empleadas al emitir la calificación final.

El trabajo por competencias es una metodología que se basa en el aprendizaje significativo que sirve al alumno para encarar con éxito el futuro y que le permite aprender cómo, cuándo o por qué aplicar conocimientos y habilidades, así como a usar las TIC para conseguirlo. 




Orientadores:
Diana Patricia Buitrago
Jonny Edgar Bernal
Ruth Espinosa 

Ludwing Leonardo Correa